Almohadas de cuña para reflujos gastroesofágicos.
Las cuñas antireflujo son almohadas diseñadas con la intención de solucionar y aliviar el problema del reflujo gastroesofágico. Numerosas personas sufren de ERGE y la inmensa mayoría de la población mundial alguna vez ha sufrido de reflujo gastroesofágico, (ese ardor de estomago, esa sensación de acidez y pesadez tras una comida excesiva, etc.) por las diversas causas que describiremos a continuación.
La cuña anti reflujo es triangular con una inclinación que varia dependiendo del modelo o las necesidades del consumidor. Esta inclinación sirve para elevar la espalda y permitir que el alimento que hemos ingerido fluya de forma natural. Al tener el tronco ligeramente inclinado hacia arriba, la gravedad ayuda a evitar a que el alimento vuelva del estomago al esófago, evitando el reflujo y cumpliendo con la principal función de las almohadas antireflujo. A continuación analizaremos más sobre el reflujo gástrico y el ERGE pero ahora vamos a ver cuales son algunas de las mejores almohadas que pueden ayudarte a evitar el reflujo gastroesofágico:
Existen diferentes tipos de almohadas de cuña para reflujo dependiendo de quien las use. Las hay diseñadas para adultos, embarazadas, niños o bebes. También hay disponible en el mercado cuñas para elevar el colchón. Vamos a verlas.
Almohada cuña antireflujo para adulto.
Como hemos dicho, la mayoría de nosotros hemos experimentado el reflujo gastroesofágico, especialmente después de cenar en exceso o comer alimentos picantes. Si sufres de reflujo, tu sueño se verá afectado. Uno de los beneficios que aportan las almohadas en forma de cuña es intentar garantizar una noche de sueño reparador, algo esencial para disfrutar de buena salud. Las cuñas están especialmente diseñadas para reducir los síntomas de acidez estomacal y reflujo. Si no sueles sufrir de reflujo gástrico pero has cenado en exceso, recomendaríamos utilizar una almohada antirreflujo para que duermas sin malestar y plácidamente sin que la comida ingerida no afecte tu sueño. Además, también puede ayudar a evitar los ronquidos. Aquí tienes algunas de las cuñas antireflujo para adultos disponibles:
Cuñas para camas. Elevar el colchón.
También hay en venta cuñas para elevar camas. Estas cuñas se introducen debajo del colchón de la cama. Esto hace que el colchón de tu cama se eleve con una inclinación ideal para evitar el reflujo. Este tipo de cuñas para camas es perfecto si compartes cama y los dos queréis dormir con el tronco elevado para evitar los síntomas de los reflujos gastroesofágicos. A continuación encontraréis almohadas de cuña para cama, pero antes queremos recomendar que primero midáis vuestra cama. Hay gran variedad de medidas de cuñas por lo que aconsejamos que a la hora de elegir una almohada de cuña de cama tengáis presente cuanto mide vuestra cama.
Con unas de estas cuñas podréis dormir en la posición que os resulte más cómoda mientras mantenéis elevada la parte superior del cuerpo, aunque, como veremos más adelante, recomendamos dormir siempre que se pueda sobre el lado izquierdo. Ahora vamos a comprender que es el relfujo y el ERGE y los motivos de la necesidad de comprar una almohada de cuña si presentas algunos de los síntomas que provocan los reflujos. Aconsejamos que leas con atención la siguiente información hasta las recomendaciones para evitar el reflujo, podrán ayudarte y a mejorar tu sueño.
¿Qué es el reflujo gastroesofágico?
Cuando comemos, el alimento pasa por la garganta hasta el estómago a través del esófago, tal y como se ve en la imagen de abajo. Un anillo de fibras musculares en la parte inferior del esófago, una especie de compuerta o válvula que se abre cada vez que consumimos alimentos o tomamos alguna bebida, impide que el alimento vuelva a subir. Estas fibras musculares se denominan esfínter esofágico inferior (EEI).
Ahora bien, cuando este anillo muscular no se cierra bien, los contenidos del estómago pueden volver a fluir hacia el esófago. Esto se denomina reflujo gastroesofágico.
Durante la digestión, el estómago segrega algunas sustancias para facilitar la disolución de los alimentos ingeridos, como el ácido y la pepsina. Sin embargo, cuando la válvula situada entre el esófago y el estómago se relaja demasiado, el ácido escapa y vuelve al esófago. Una anomalía, un debilitamiento o mal funcionamiento del esfínter esofágico inferior, puede provocar que el contenido gástrico salga del estómago, como el ácido gástrico, y se ponga en contacto con el tejido esofágico. La acidez de los jugos gástricos irrita y erosiona la delicada mucosa esofágica, lo que genera incomodidad e incluso dolor, pudiendo a la larga derivar en complicaciones de salud más serias.
Esto nos puede pasar a todos en algún momento por diversas causas que veremos a continuación, pero cuando nos ocurre con cierta frecuencia, puede que tengamos ERGE.
¿Qué es el ERGE (Enfermedad por reflujo gastroesofágico)?
La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es una afección en la cual los contenidos estomacales se devuelven desde el estómago hacia el esófago (tubo de deglución) con frecuencia. Como hemos dicho anteriormente, todos podemos sufrir alguna vez reflujos, pero si esto te ocurre más de 3 veces a la semana, puedes que tengas ERGE.
SÍNTOMAS del reflujo gastroesofágico y del ERGE.
Algunos de los síntomas de los reflujos gástricos son los siguientes:
- Sensación de ardor o irritación a nivel del esternón.
- Sabor amargo o ácido en la boca.
- Dolor torácico.
- Agruras, es decir, la sensación de dolor ardiente en la boca del estómago o en la parte inferior del pecho.
- Dificultades para deglutir.
- Dificultad para tragar.
- Una sensación de ardor en el pecho, que suele darse después de comer y que puede ser peor por la noche.
- Dolor en el pecho.
- Regurgitación de alimentos o de líquidos agrios.
- Sensación de tener un nudo en la garganta (sensación de globo).
- Dolor de garganta.
- Afonía por irritación.
- Problemas para respirar.
- Carraspera, es decir, aspereza o irritación en la garganta que pone ronca la voz.
- Mal aliento.
- Náuseas.
- Vómitos.
- Sibilancias. A veces, el contenido del estómago se filtra en los pulmones, causando tos y/o sibilancias.
Si tienes reflujo gastroesofágico durante la noche, también podrías tener:
- Tos crónica.
- Problemas de asma por primera vez o asma que se agrava.
- Acidez o sensación de ardor.
- Trastornos del sueño.
Si utilizaras una cuña para dormir podrías comprobar si se reducen estos síntomas. Nuestro consejo es que te hagas con una almohada antireflujo, la pruebes unas noches y analices los resultados. Más abajo de esta página hay muchas más recomendaciones pero la cuña antireflujo puede ser una solución rápida y económica.
CAUSAS del reflujo gastroesofágico.
Las causas de sufrir reflujos que permitirá el retorno de los ácidos estomacales hacia el esófago y la boca son las siguientes:
- Comer en exceso.
- Cenas copiosas.
- Acostarse después de comer, especialmente si la comida ha sido muy abundante.
- Ingesta de alimentos picantes, frituras o con mucha grasa.
- Los alimentos irritantes.
- Tomar café o bebidas con cafeína.
- Bebidas carbonatadas.
- Ciertos medicamentos.
- El alcohol.
- El aumento de peso.
- Hernia de hiato.
- Problemas de salud.
Recomendaciones para evitar el reflujo.
Los siguientes consejos te servirán para eliminar o reducir los reflujos gastroesógicos:
- Dormir con una almohada de cuña antireflujo. Al no tener al mismo nivel los órganos del cuerpo y al tener la cabeza levantada a un nivel más alto que el estómago, se reduce la posibilidad de reflujo, es decir, que los alimentos digeridos se devuelvan al esófago. Evita que el estómago y la garganta estén a la misma altura.
- Dormir con la posición del lado izquierdo, ya que ayuda al vaciado estomacal. Al dormir acostado sobre el lado izquierdo el esfínter esofágico inferior se mantiene elevado, una condición ideal para combatir el reflujo gastroesofágico nocturno.
- Evitar cenar antes de irte a dormir. Al meternos en la cama con el estómago lleno, no favoreceremos la digestión y será más probable sufrir reflujo, por eso es aconsejable cenar dos o tres horas antes de acostarse y mantener una posición erguida o ligeramente inclinada tras las comidas para facilitar la digestión, por ello, evita acostarte mientras el estómago está trabajando. La misma recomendación se aplica en el caso de la siesta.
- Si duermes la siesta, utiliza la cuña antireflujo o hazlo en un sofá o sillón en posición sentada o ligeramente inclinada, en lugar de reposar acostado en la cama.
- Evitar dormir con pijamas o ropa apretada. A la hora de dormir es importante evitar aquellos pijamas que sean demasiado apretados o que puedan oprimir el abdomen. Cuanta menos presión tengamos sobre el estómago, mejor.
- No usar correas apretadas o vestimentas alrededor de la cintura que presionen demasiado. La presión ejercida en el estómago puede permitir el retorno de las secreciones ácidas del estómago hacia el esófago.
- Utilizar ropa cómoda.
- Dejar de fumar. Son numerosas las dañinas consecuencias para la salud que tiene fumar. Una de tantas de ellas es que los químicos en el humo del cigarro o en los productos del tabaco debilitan el esfínter esofágico inferior.
- Reducir el estrés. Un control y adecuado manejo del estrés no solo disminuye el riesgo de reflujo gastroesofágico, sino que favorece una buena calidad de sueño.
- Bajar de peso. La obesidad aumenta la presión abdominal debido a la acumulación de grasa en el zona abdominal, lo cual puede hacer que los contenidos del estómago se devuelvan al esófago.
- No saciarse.
- Evitar los medicamentos y alimentos que causan síntomas o estimulan la producción de ácido.
- Si puedes, realiza siempre cenas ligeras.
- Evita las carnes embutidas, frituras o alimentos muy grasosos, sobretodo antes de acostarte.
- Incluir en la dieta alimentos que sean ricos en magnesio y calcio, que ayudan a regenerar y proteger las mucosas del sistema digestivo y la cavidad bucal. Aquí tienes una serie de alimentos que te ayudarán a dormir mejor.
- Pasear, andar. El movimiento ayuda a la digestión, acelerando el proceso digestivo, evitando la sensación de pesadez y favoreciendo el tránsito intestinal.
- Evitar el reflujo inducido por el ejercicio. Cuando sientas ardor estomacal evita realizar ejercicios como abdominales o ejercicios de fuerza. La presión ejercida sobre el área abdominal puede generar reflujos, por lo tanto recomendamos reprogramar tu ejercicio intenso para el día siguiente y andar sobre la cinta o salir a pasear.
- Evitar el alcohol.
- Evitar o limitar las bebidas con cafeína.
- Evitar las bebidas con carbohidratos.
- Consultar con tu médico medicamentos contra el reflujo.
- Consultar al médico. Si los síntomas persisten o empeoran a pesar de aplicar estas recomendaciones, lo mejor es acudir al médico. El profesional será quien determine su causa y el tratamiento más adecuado.
